Es un vino que combina a la perfección y equilibra la tradición con sutiles toques de atrevimiento. Contiene una estela sorpresivamente robusta y un color rojo atejado para encandilarnos con su brillo y limpieza, siendo estas características una prueba más de la exquisitez propia de Mayor de Migueloa. Una vez posado sobre la copa, ofrece una experiencia olfativa, audaz y sorprendente de aromas golosos y complejos, que combinan a la perfección con la vibración de notas primarias, para finalmente apreciar su faceta de aromas secundarios y elegantes vainillas y ahumados, aromas que le dan cuerpo y forma a nuestro vino. Su calidez en boca provoca una sensación agradable y sedosa, acidez equilibrada, elegante y redondo con una prolongación de bienestar y una longevidad envidiable. Estamos ante un vino que trasmite sensaciones únicas y que no te dejará indiferente.
Reserva
Despalillado, depósitos Ganimedes. 30-40 días de Botonage.
Crianza 18 meses en Barrica de Roble Americano.
18 meses en botella